LA REGIÓN
El traslado del hospital de Toén a Piñor se realizará tras el verano
El presupuesto para los trabajos de rehabilitación, que comenzarán a mediados de junio, asciende a 500.000 euros.
REDACCIÓN. OURENSE - 25-05-2011
El plazo para el traslado del hospital Psiquiátrico de Toén a Piñor fue anunciado ayer por la gerente del Complexo Hospitalario de Ourense, Eloína Núñez, quien aseguró que se producirá a finales de septiembre. Para ello, los primeros trabajos de rehabilitación del hospital de Piñor comenzarán a mediados del próximo mes de junio con un presupuesto que rondará los 500.000 euros, según avanzó el director de Recursos Económicos del CHOU, Juan José Pérez, aunque el concurso para adjudicar la obra todavía está abierto.
La gerente defendió el proyecto al considerar que 'técnica y clínicamente es lo más adecuado' porque las actuales instalaciones del psiquiátrico son 'indignas y no se adaptan a los requerimientos mínimos asistenciales'. Núñez también quiso acallar las voces críticas asegurando que la decisión de cerrar Toén ha sido fruto de una decisión consensuada y validada por los responsables del Servicio de Psiquiatría. Ignacio Gómez-Reino, jefe del área, se mostró satisfecho con el traslado al 'cumplirse todos los requisitos necesarios' y tratarse de 'un cambio necesario desde el punto de vista técnico'.
Las actuaciones previstas para el mes de junio en Piñor se limitarán al desmontaje y traslado de equipamientos, además de la construcción de una habitación prototipo compuesta por ventanas de seguridad sin posiblidad de apertura, puertas correderas, cámaras de vigilancia y un cuarto de observación. En el mes de julio, aprovechando el cierre de camas por la temporada estival, comenzarán los trabajos más costosos de albañilería, fontanería, electricidad, sistema de ventilación y sectorización del plan de autoprotección (renovación del sistema contraincendios), que previsiblemente, rematarán a finales de septiembre. Coincidiendo con esta fecha, se trasladarán los últimos pacientes ingresados en Toén para cerrar, definitivamente, este centro hospitalario.
En la planta baja de Piñor se ubicará el área médica para mantener una reserva asistencial con camas para los pacientes, en la segunda se instalará la Unidad de Cuidados de Rehabilitación y larga estancia y, en la tercera planta, se ubicará la Unidad de Cuidados Especiales y los talleres.
El traslado del hospital se basa en tres objetivos básicos de la asistencia pisiquiátrica que, según enumeró Eloína Núñez, consisten en 'una integración plena de este servicio en el sistema sanitario, la atención en el ámbito comunitario y la potenciación asistencial a nivel ambulatorio'. La gerente no avanzó nada respecto al Plan Director del CHOU, que todavía se encuentra paralizado a la espera de concretar el anteproyecto.
La gerente defendió el proyecto al considerar que 'técnica y clínicamente es lo más adecuado' porque las actuales instalaciones del psiquiátrico son 'indignas y no se adaptan a los requerimientos mínimos asistenciales'. Núñez también quiso acallar las voces críticas asegurando que la decisión de cerrar Toén ha sido fruto de una decisión consensuada y validada por los responsables del Servicio de Psiquiatría. Ignacio Gómez-Reino, jefe del área, se mostró satisfecho con el traslado al 'cumplirse todos los requisitos necesarios' y tratarse de 'un cambio necesario desde el punto de vista técnico'.
Las actuaciones previstas para el mes de junio en Piñor se limitarán al desmontaje y traslado de equipamientos, además de la construcción de una habitación prototipo compuesta por ventanas de seguridad sin posiblidad de apertura, puertas correderas, cámaras de vigilancia y un cuarto de observación. En el mes de julio, aprovechando el cierre de camas por la temporada estival, comenzarán los trabajos más costosos de albañilería, fontanería, electricidad, sistema de ventilación y sectorización del plan de autoprotección (renovación del sistema contraincendios), que previsiblemente, rematarán a finales de septiembre. Coincidiendo con esta fecha, se trasladarán los últimos pacientes ingresados en Toén para cerrar, definitivamente, este centro hospitalario.
En la planta baja de Piñor se ubicará el área médica para mantener una reserva asistencial con camas para los pacientes, en la segunda se instalará la Unidad de Cuidados de Rehabilitación y larga estancia y, en la tercera planta, se ubicará la Unidad de Cuidados Especiales y los talleres.
El traslado del hospital se basa en tres objetivos básicos de la asistencia pisiquiátrica que, según enumeró Eloína Núñez, consisten en 'una integración plena de este servicio en el sistema sanitario, la atención en el ámbito comunitario y la potenciación asistencial a nivel ambulatorio'. La gerente no avanzó nada respecto al Plan Director del CHOU, que todavía se encuentra paralizado a la espera de concretar el anteproyecto.
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